lunes, 30 de diciembre de 2013

Torre de Cala en Basset

La última excursión del año 2013 y lo hacemos con una excursión muy facilita. ¿Os acordáis de la preciosa Cala en Basset? Pues nos quedó por visitar la torre que lleva su mismo nombre. Y como la otra vez no venía ni mi marido Xisco ni mi perrita Dori, ahora ya conocemos los tres este sitio.


Torre de Cala en Basset

Es una excursión muy corta. Hay que seguir las mismas indicaciones que ya os comenté para llegar a la cala. El único cambio es donde se encuentra la flecha gigante hecha con piedras. La otra vez seguimos hacia la derecha para bajar hasta la cala, esta vez seguiremos hacia donde apunta la flecha que nos llevará directamente a la torre.


El camino sale de los árboles y se vuelve más pedregoso. Pero no veo ninguna complicación para llegar hasta la torre. En poco menos de 10 minutos llegamos a ella. Solo hay un pequeño desvío provocado por un árbol caído, pero el camino es bastante intuitivo.


A pesar de estar abandonada (como la mayoría de las torres de la isla) se puede entrar en ella y ver sus diferentes compartimentos. Incluso, con mucho cuidado, acceder a la parte superior de la torre, desde donde podremos ver la isla de La Dragonera a la izquierda y la cala a la derecha.

Cala en Basset
Si os parece muy corta esta excursión, os animo a bajar hasta la cala y ver los barros que aquí se acumulan y donde la gente aprovecha para hacer barroterapia. ¡Tenéis que probarlo! Eso sí, mucho cuidado si vais con niños, porque la bajada no es nada fácil.



Aunque es una excursión muy sencilla os dejo el enlace de Wikiloc para que veáis el camino.

Y desde esta nueva torre de Mallorca que hemos conquistado y con la isla de La Dragonera a nuestras espaldas, nos despedimos de este año.

¡Hasta la próxima!


lunes, 16 de diciembre de 2013

Parc de Sa Quarentena

Hace tiempo que fuimos a este precioso parque que se encuentra en el Paseo Marítimo de Palma. Siempre que pasaba por delante de la puerta del parque me preguntaba ¿cómo sería por dentro? La verdad es que había pasado miles de veces y nunca había entrado hasta este día.


Parc de Sa Quarentena

Este parque público conocido como Sa Quarentena debe su nombre a que antiguamente los pescadores que estaban enfermos se cuidaban en un hospital de la zona y permanecían 40 días aislados en esos jardines por razones sanitarias. Cuando se construyó este parque estaba muy alejado de la ciudad y por eso lo eligieron para ese fin.

Entrada inferior
   
Entrada superior

El parque tiene dos entradas. Nosotros entramos por la del Paseo Marítimo y existe otra entrada en la Plaza Mediterráneo. En esta última se pueden ver tres escudos en la parte superior. El de en medio es el escudo real y los de los lados son el escudo de Palma. Debajo de los escudos se puede ver una inscripción de la inauguración del parque en 1656.

Está dividido en varias alturas y están conectadas entre sí por escaleras de piedra. Hay varios bancos y espacios en los que relajarse. Los árboles y plantas que se encuentran en este parque hacen que te aísles por completo del bullicio de las calles y parece que te teletransportas a otro lugar. También hay una fuente que se conecta de una planta a la otra por riachuelos que te dejan escuchar el rumor del agua. ¡Qué paz!


Además hay una zona con columpios para que se distraigan los más pequeños. La verdad es que es un parque para todas las edades. Si tuviera que decir algo negativo sobre este parque sería que no está preparado para carritos o sillas de ruedas. Supongo que en aquella época no se preocupaban por estas cosas.


Me alegro mucho de haber visitado por fin este parque y además haberlo hecho con la persona que más quiero en este mundo. T'estim!!


¡Hasta la próxima!


jueves, 12 de diciembre de 2013

Sineu

Este fin de semana fuimos a visitar Sineu aprovechando que celebraban la Fira de Sant Tomàs (Mostra de Matances).

Sineu

Primero visitamos la plaza Es Fossar donde se concentraba la mayor parte de la Fira. Es en esta plaza donde cada miércoles podemos encontrar el famoso mercado de Sineu. Había muchos puestos de productos mallorquines de cerámica, quesos, embutidos... Y en medio de la plaza un numeroso grupo de personas ataviadas con el traje típico bailaban boleros. Me encanta esta música, es muy alegre y tenemos la tarea pendiente de algún día aprender este baile como buenos mallorquines que somos.




En la parte más elevada de la plaza se encontraba la muestra del despiece del cerdo y mostraban a la gente como se hace la sobrassada, los butifarrones... No es la primera vez que lo vemos porque casi cada año vamos a casa de unos amigos a hacer matanzas y juro y prometo que jamás volveré a ir tan pronto como aquel año (los chillidos del cerdo aún resuenan en mi cabeza). Por parte del Ajuntament podías degustar una deliciosa llesca de pa con sobrassada frita y un vaso de vino por sólo 1'50 €.


Antigua estación de Sineu
Y desde aquí empezamos nuestra ruta. Salimos de la plaza por el carrer Gran hasta llegar a la antigua estación de Sineu. El edificio se construyó en 1926, pero se cerró en 1975 cuando la línea ferroviaria hacia Manacor y Artà dejó de funcionar. Como estación en sí, sólo se usa el anden para el tren que va hasta Manacor que vimos pasar justo en ese momento. Desde hace más de 30 años el edificio cumple la función de centro de artes plásticas.


Seguimos por la calle de s'Estació hasta llegar al paso de nivel por el que cruzamos a la derecha. Hay una pequeña plaza en la que podemos ver el Pou de Ca Na Morera.


Molí d'en Pau
Si seguimos por esta calle llegaremos hasta la rotonda de la carretera de Inca. En esta rotonda se encuentra Es Molí d'en Pau. Uno de los molinos mejor conservados de Sineu que actualmente es un restaurante. Documentado en el siglo XVIII fue restaurado en el año 1992.

Retrocedemos en nuestros pasos y giramos a la derecha por la primera calle. Desde esta calle podemos ver algunas torres de molinos que actualmente pertenecen a las casas de la zona y forman parte de esta como si fuese una dependencia más.



Al final de esta calle giramos a la izquierda y después a la derecha. Llegamos a un camino en el que podemos tener una vista fantástica de Sineu y donde también encontraremos dos preciosos molinos que están muy bien conservados. El primero de ellos es el Molí d'en Gaspar y el que está justo a su lado es el Molí d'en Mulet.

Seguimos descendiendo por una callejuela que nos llevará hasta las vías y saldremos al paso de nivel que habíamos cruzado antes. Dejamos atrás el barrio de Ses Cases Noves y justo al cruzar a mano derecha podemos ver el Pou dels Horts. Es un pozo grande y cubierto que se utilizó también como lavadero. Lo malo es que con lo de la Fira había un montón de coches aparcados justo delante que no dejaban verlo bien.


Pou de Sa Morera
Y justo en frente de este encontramos otro pozo; el Pou de Sa Morera. Según la información que obtuve del Ajuntament de Sineu, recientemente ha estado reformado y se le ha añadido una pica de piedra picada procedente del Pou dels Horts.

Nos dirigimos al ayuntamiento. Seguimos el carrer Major hasta encontrar la calle de Sant Francesc. Giramos por esta calle y podemos ver el Convent del Mínims. Y justo al lado está el Ajuntament de Sineu que se encuentra ubicado en las antiguas dependencias del convento. La entrada del ayuntamiento era la entrada principal del convento.


Es un edificio precioso y seguro que por dentro lo es aún más. Unos amigos nuestros se casaron en este ayuntamiento. Aunque yo todavía no estaba en sus vidas, me habría encantado ir...

Dejamos el ayuntamiento atrás y seguimos por el carrer del Vent hasta llegar hasta la Creu dels Morts. Su nombre se debe a la construcción del cementerio en la carretera de Inca, porque delante de ella pasaban los muertos que se trasladaban desde Sineu al cementerio para ser enterrados.

Església de Santa Maria
Si seguimos por la calle de la Rosa llegaremos a la plaza principal del pueblo. Sa Plaça es donde se encuentra la Iglesia de Santa María. Antiguamente se realizaba el mercado en esta plaza, pero debido a la cantidad de gente que acudía al mercado, decidieron trasladarlo a la plaza Es Fossar.

Si os fijáis a la derecha de la entrada de la iglesia veréis un pequeño puente que se conoce como Pontet de Santa Bàrbara que une la iglesia con el campanario. Pasaremos por debajo de este puente para llegar a la plaza de Sant Marc, donde se encuentra la estatua dedicada al patrón de Sineu. Sant Marc está representado por un león de cobre alado que aguanta el escudo de Sineu. La fiesta de su patrón se celebra el 25 de abril y seguro que deben organizar algún evento.


Bajamos las escaleras que se encuentran justo debajo de la estatua y seguimos hacia la derecha para girar nuevamente a la derecha en la calle del Bisbe. Giramos por el carrer Palau donde al final encontramos el antiguo Palau dels Reis de Mallorca. Actualmente es un monasterio concepcionista y tuvimos la suerte de poder entrar.


Salimos del antiguo Palau y bajamos por las escaleras hasta llegar a la calle del Reverendo Arnau Ramis, donde seguiremos por la derecha. Avanzamos hasta llegar al primer cruce donde giraremos dos veces a la izquierda hasta llegar a la calle de Ponent. Aquí encontraremos el antiguo Hospital de Sineu y el Oratorio de Sant Josep. Este último lo encontramos abierto y un hombre que estaba allí nos estuvo contando detalles de las obras de arte que se encuentran dentro.


Antiguo Hospital de Sineu
    
Oratori de Sant Josep

Si seguimos por la calle del Hospital llegaremos a la calle Mercadal que desemboca en la plaza de Sant Marc. Desde esta plaza se puede llegar fácilmente a la plaza Es Fossar donde empezamos nuestra preciosa visita.

Nos despedimos de vosotros desde las escaleras que hay al lado del antiguo Palau dels Reis de Mallorca.


¡Hasta la próxima!



PD: Se me olvidó poner el lipdub de Sineu m'agrada! Pues aquí lo tenéis. ¡Me encantan estos vídeos!




miércoles, 4 de diciembre de 2013

Can Prunera Museu Modernista

El día que fuimos a ver el Ferrocarril de Sóller, también fuimos a este precioso museo. Y hoy os voy a contar cómo fue nuestra visita.


Can Prunera Museu Modernista

El Museu de Can Prunera se encuentra situado en una casa muy especial en el carrer Sa Lluna de Sóller. Esta casa pertenecía a la familia de Can Prunera y su historia es muy interesante.

Ya sabemos que una de las cosas que más destacan en Sóller son las naranjas y los limones. Pues esta familia se dedicaba a la venta de estas frutas (de ahí su nombre tan característico). Debido a una fuerte plaga que destruyó toda la cosecha se vieron obligados a emigrar a otros países para buscarse la vida como tantas otras familias. Vivieron muchos años en Francia y cuando ya tenían una fortuna hecha volvieron a Sóller y construyeron esta casa. Se puede ver el estilo francés en muchas partes de esta casa.

Tiene un patio trasero muy original en el que en verano ponen tablas sobre estas pequeñas columnas de hormigón y donde realizan conciertos de música clásica. Si no lo recuerdo mal, el patio no era así en la antigüedad sino que está reestructurado. Aquí podemos ver algunas esculturas.



La fachada de la casa es completamente diferente a las casas que podemos ver en el pueblo. Según he leído en su página web, existen otros tres edificios que comparten estas características y que se encuentran en Palma.

Las ventanas de la fachada exterior tienen una forma tan espectacular que las persianas se tuvieron que hacer a mano completamente. Las puertas que dan al patio interior tienen unas vidrieras con unos detalles que ¡son impresionantes!



Dentro de la casa todavía se conservan los suelos, muebles, camas y enseres de la familia que podemos observar fácilmente y que ayudan a hacerse una idea de como debían vivir antiguamente. Está todo lleno de detalles desde el techo hasta el suelo.




Dentro del museo hay varias salas de exposiciones permanentes y otras que son temporales. También hay una pequeña sala en la que se puede ver una extensa colección de muñecas antiguas.

No soy muy entendida en cuadros, no os voy a engañar. Me gustan los cuadros que me sorprenden o me dicen algo.

Esta casa se divide en cuatro plantas y tiene una preciosa escalera de caracol que sube desde el sótano hasta el ático. ¡Una maravilla! La barandilla de metal y madera es preciosa. Justo encima de la escalera hay una claraboya por la que entra muchísima luz y hace que esta estructura destaque todavía más.



Si os apetece visitar este museo, este fin de semana, los días 6 y 7 de diciembre, la entrada tiene un precio especial a 3€ debido a un evento que realizan en Sóller. Puede ser una excusa perfecta para visitar este museo y os invito a que los conozcáis.

Aunque a esta visita fui sin mi marido Xisco, espero que podamos ir alguna vez juntos y enseñarle esta maravilla de museo.

¡Hasta la próxima!