martes, 25 de junio de 2013

Museu de sa jugueta

La semana pasada fuimos a cenar, casi por casualidad, a uno de los sitios que tenía pendiente visitar. Resulta que en el Museu de sa jugueta hay un bar que se llama Toys & tapas en el que hacen unas hamburguesas gigantes de 1 kilo. Nuestro amigo Pedro conoce a uno de los socios y ya le había comentado un par de veces a ver si se atrevía con la hamburguesa Hulk (como se llama a esta hamburguesa de 1 kilo). Si eres capaz de comerte la hamburguesa tú solo, te regalan una camiseta honorífica que demuestra que eres el campeón. Si no recuerdo mal, creo que hasta la fecha solo lo han conseguido dos personas.

Nuestra amiga María posando con Hulk
He de decir que nosotros nos la comimos entre cuatro... ¡no somos tan valientes! La hamburguesa estaba muy buena y era muy completa, acompañada de deliciosas patatas fritas. Me gustó mucho la mezcla de la carne y estaba muy sabrosa. Aunque era un poco difícil para comer. No sabías por donde tenías que hincarle el diente.


Después de la cena probamos un par de chupitos muy originales que os servirán estos encantadores camareros de Toys & tapas. ¡Vaya sorpresa para algunos!

El bar está decorado con juguetes antiguos. Aviones que cuelgan del techo, cabezudos encima de la barra, fotos antiguas y lo más original, la barra está forrada con páginas de cómics antiguos. También hay una pequeña exposición temporal de unos juguetes muy especiales. No puedo explicároslo, tendréis que ir a verlo. Aunque el museo ya estaba cerrado a esas horas tuvieron el detalle de abrirlo para nosotros solos. ¡Esto de tener enchufe es un auténtico lujo!

No se si voy a poder encontrar las palabras justas para definir lo que vimos allí. ¡Cuántos juguetes! ¡Madre mía! Había de todo tipo de juguetes antiguos. Coches, bicicletas, muñecas, juegos de mesa, casitas... y todo lo que te puedas imaginar. El museo tiene tres plantas y está ordenado por temas. Lo que más nos llamó la atención, sin ninguna duda, fueron los triciclos antiguos. Los mecanismos para mover el triciclo eran de lo más extraño.


Otra de las cosas que también nos gustó mucho es que al lado de muchos juguetes podías ver fotos antiguas con los niños de aquella época jugando con dichos juguetes. Esto es más que un museo del juguete, ¡es un museo de historia viva popular!


Los payasos de la tele
He de decir que aunque muchos de los juguetes me sonaban, son mucho más antiguos que yo y no son de mi época. Pero vi algo que me encantó. Aquellas muñecas de papel recortables. Yo jugaba con ellas de pequeña... Y si tuviera que quedarme con algo especial de este museo, elegiría los muñecos de los payasos de la tele. ¿Cómo están ustedes?


Recomendado 100 por 100 la visita, tanto al museo, como al bar. Y desde este lugar tan especial, que nos ha encantado, nos despedimos ¡hasta la próxima!



lunes, 10 de junio de 2013

Por Palma con GO!BLU

En invierno me propusieron hacer una visita especial al centro de Palma en uno de los medios de transporte que se están poniendo cada vez más de moda. Después de vivir la experiencia de conducir un coche eléctrico, tenía la espinita clavada de poder probar un bicicleta eléctrica. Y nuestros amigos de GO!BLU nos ofrecieron esta oportunidad a un grupo de twiteros de la isla.


Tienen su tienda cerca del Mercat de Santa Catalina en la calle Pursiana y disponen de bicicletas, motos y patinetes eléctricos que se pueden alquilar con o sin guía. Nosotros hicimos parte de la ruta que ofrecen por el casco antiguo de Palma.

Acostumbrada a mi pequeña bicicleta plegable, cuando cogí la bici eléctrica me parecía que llevaba una moto gigante. Para los que no hayáis tenido la oportunidad de probar una os explico un par de detalles. El mecanismo que dirige la batería tiene varias posiciones: se puede llevar apagado (cosa que no os recomiendo, porque la bicicleta pesa bastante), y diferentes posiciones según la pendiente (para que ayude más o menos). El sistema funciona de tal manera que en cuanto nota que te cuesta pedalear la batería te empuja. Y te empuja de manera literal, ¡parece que tienes a alguien detrás que te está empujando! La verdad es que para las cuestas está genial. El único inconveniente que tienen este tipo de bicicletas es que no puedes pedalear hacia tras porque frenas en seco. ¡Estuve a punto de tener un par de accidentes por esto!


Consolat de la Mar
Empezamos nuestra pequeña visita atravesando Sa Faixina y el Passeig Sagrera hasta llegar a nuestra primera parada: el Consolat de la Mar. Aquí está la sede del Govern Balear y se puede visitar el día de les Illes Balears (1 de marzo). Nosotros fuimos el año pasado y la verdad es que vale la pena la visita.

Reanudamos la marcha hacia el Parc de la Mar. Por cierto, nos he contado que probablemente lo más difícil de llevar esta bicicleta sea arrancar. ¡Sobre todo en cuesta! Seguro que hay más de uno que cuando lea esto y lo haya probado, sabrá de lo que hablo...



La Seu
La siguiente parada es probablemente uno de mis sitios favoritos de Palma. Desde el Parc de la Mar se puede ver perfectamente la catedral de Palma. Creo que no conozco a nadie que no haya hecho alguna foto desde aquí y siempre ha sido el sitio por referencia para fotos de bodas, bautizos y comuniones.

Volvemos sobre nuestros pasos y subimos por la Avenida Antonio Maura hasta llegar a la Plaça de la Reina y de aquí subimos hacia la derecha para pasar en frente de correos y dirigirnos a la entrada principal de la Catedral. En esta calle es cuando más me gustó esto de las bicicletas eléctricas. ¡Es una pasada! Con la batería no cuesta nada subir las cuestas.

Seguimos por detrás de la catedral donde pude ver un jardín precioso que estoy deseando ir a descubrir. Si lo recuerdo bien se trata del jardín del Palau Episcopal y creo que se puede visitar.

Unas calles después llegamos hasta el Teatre Municipal Xesc Forteza. No sabía muy bien donde estaba este teatro, así que me alegro de haber hecho esta visita. A ver si algún día podemos ir a ver algo aquí.


Convent de Sant Francesc
Continuamos por el carrer Monti-Sion hasta llegar al Convent de Sant Francesc y seguimos por la izquierda hasta llegar a la Església de Santa Eulalia, justo detrás del Ajuntament de Palma. Cruzamos la iglesia por una calle lateral y llegamos a la Plaça Major. Desde aquí tuvimos que ir de pie, porque había mucha gente por la calle y no se podía circular bien en bici.

Atravesamos la Plaça Major y seguimos por la calle San Miguel hasta la Costa de la Pols donde volvimos a montar en las bicis para llegar a La Rambla.





Gran Hotel
Una parada obligada en esta zona es sin duda el Gran Hotel. Uno de los más bellos edificios de Palma que se convirtió en centro cultural y donde está la sede de la Fundación la Caixa. Recuerdo que una vez visité una exposición de Egipto que me dejó huella. Hace tiempo que no voy, así que me lo apunto en "tareas pendientes" :P

Seguimos de ruta y esta vez pasamos por el Born. Paseo mítico y bonito donde los haya. Cuando llegamos de nuevo a la Plaça de la Reina, giramos a la derecha y nos adentramos en las viejas calles de La Lonja hasta llegar a la Plaça Drassana. Justo detrás del Consolat de la Mar.



Y desde aquí seguimos hasta llegar a la calle Pursiana donde está ubicada la tienda de GO!BLU. Podéis ver la ruta completa desde este enlace a nuestra cuenta en Wikiloc.


Me encantó poder disfrutar de esta visita diferente a mi ciudad y le doy las gracias a GO!BLU por la invitación. ¡Hasta la próxima!