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sábado, 3 de diciembre de 2016

CaixaForum

Hoy tocaba visita cultural en Palma y gracias a la invitación de CaixaForum hemos estado en la exposición de la dinastía Ming.

Los siete emperadores de la dinastía Ming


El Gran Hotel abrió sus puertas para acoger a los primeros turistas que llegaban a Palma allá por el año 1903 y estuvo en funcionamiento unos 40 años. Después de una gran reforma, este edificio emblemático de Palma, alberga desde 1993 diferentes exposiciones culturales de todo tipo. El Gran Hotel cuenta con varias plantas en las cuales puedes encontrar exposiciones temporales y otras permanentes. Como la del pintor modernista Hermen Anglada-Camarassa.

Antes de entrar al Gran Hotel merece la pena echar un vistazo a su majestuosa fachada, tanto de día como de noche, y apreciar todos sus detalles. Siempre me ha parecido uno de los edificios más bellos de nuestra ciudad.

La exposición que visitamos nosotros, Ming, está ubicada en dos plantas. Puedes visitarla hasta el 19 de febrero de 2017 y la entrada cuesta 4 euros, pero si eres cliente de CaixaBank tienes entrada libre. Los niños hasta 16 años entran gratis.

Cerámica, mapa de rutas comerciales y bordado

En esta exposición puedes encontrar muchas muestras de arte de aquella época, como cerámica, pintura, poemas e incluso bordados que me recordaban al típico brodat mallorquín. Todos los objetos están debidamente etiquetados y explicados, con lo que puedes aprender mucho sobre esta época.

La dinastía Ming dominó China durante 276 años. Desde el año 1368 hasta el 1644. Durante este tiempo llegaron a gobernar siete emperadores de la familia Zhu y su población casi se triplicó. Una curiosidad sobre el nombre de esta dinastía es que Da Ming significa "gran resplandor". Si queréis conocer estos y otros detalles no dejéis pasar la oportunidad de visitar la exposición. 

Espacio familiar y educativo
Lo que me parece genial, es que también han pensado en los niños y tienen un rincón especial para ellos en los que se pueden convertir en artistas de la dinastía Ming por unos minutos.

Hay unas mesas con plantillas en las que pueden crear sus propios objetos de cerámica y decorarlos a su gusto.

¡Esto me ha encantado! Seguro que cuando nuestra hija sea un poco más mayor se lo va a pasar pipa en exposiciones como esta.



Mapa interactivo
Otra de las cosas que me llamó muchísimo la atención y que está muy bien hecho es el mapa interactivo de aquella época. Basándose en un mapamundi muy antiguo que pintaron los chinos, han creado este mapa interactivo en el que te cuentan la historia de los personajes más influyentes y de cómo está distribuido el mapa, así como otros detalles o comentarios que están escritos en este documento.


Me voy muy contenta con lo que hemos podido ver y me alegro muchísimo de haber recibido su invitación y compartir con nosotros esta exposición que le recomiendo a todo el mundo.

Para estas Navidades tienen un montón de actividades para realizar con los niños, que seguro serán de lo más entretenidas, y  que harán mucho más llevadera la espera de los Reyes Magos... Encontraréis más información en su página web.


Me despido de vosotros desde la entrada al Gran Hotel y al CaixaForum con este pequeño detalle que nos han entregado. ¡Gracias!

¡Hasta la próxima!




martes, 21 de enero de 2014

Visca Sant Antoni!

Museu de Sant Antoni i el Dimoni

Antes de las fiestas de Sant Antoni visitamos este museo de Sa Pobla. Tenía muchas ganas de visitar este museo porque nosotros venimos cada año a las fiestas de Sant Antoni de Sa Pobla, ya que Xisco tiene familia aquí. Si no habéis venido nunca, os animo a verla algún año y conocer esta fiesta que se celebra desde 1365. ¡Hay que vivirla!

El museu de Sant Antoni i el Dimoni antiguamente estaba ubicado en la antigua estación de Sa Pobla y desde 2007 se encuentra en Can Planes. Margarita fue nuestra guía en el museo y como buena poblera vive con emoción estos días.


Sant Antoni
Nada más entrar en el museo lo primero que podemos ver es la talla de Sant Antoni que data del siglo XIX y que pertenece a la parroquia de Sa Pobla. Aunque casi todo el año se la presta al museo para su exposición. Podemos afirmar que es la original porque justo ese día se la llevaron para un acto oficial. ¡Menuda sorpresa nos llevamos! Menos mal que me dio tiempo a hacer la foto...



Justo al lado de Sant Antoni hay un bombo en el que antiguamente se hacía el sorteo de un cerdo entre todos los vecinos del pueblo para hacer matanzas.  No hay que olvidar que Sant Antoni es el patrón de los animales y supongo que de ahí viene esa tradición, que actualmente ya no se hace.

La Obreria de Sant Antoni se encarga de que la fiesta continúe año tras año con su protocolo. Son los encargados del mantenimiento de la Colla de Dimonis en los que hay 14. 11 son propiedad de la Obreria y los otros 3 son del Ayuntamiento. Cada año se celebra un sorteo para estos tres dimonis entre todos los vecinos que se apunten.


Margarita con los carteles de fondo
En una pared del museo pudimos ver todos los carteles oficiales de la fiesta de Sant Antoni. Antiguamente eran pintores profesionales los que realizaban estos carteles, pero desde 2006 se realiza un concurso para elegir el cartel de ese año. Hubo un cartel que fue especialmente polémico, pero me encantaría que fuerais al museo a ver si adivináis cual pudo ser. Seguro que os sorprenderá tanto como a nosotros.


El día 16 de enero los actos festivos comienzan en la iglesia parroquial en la que se celebra un misa y después un personaje relevante de Sa Pobla, que es elegido por la Obreria, pronuncia es Clam de Sant Antoni. Un pequeño discurso que siempre acaba con el clásico "Visca Sant Antoni". Los actos que se celebran en la iglesia se les conoce como Ses Completes.


El dimoni Conguito
Aunque el protagonista de la fiesta es Sant Antoni, los dimonis tienen mucha representación con muchos demonios de diferentes clases. Pero sin lugar a dudas el más famoso es al que llaman Conguito. Es el líder de los dimonis, de color negro y que persigue a todos los niños del pueblo para que estos les den su chupete.

Acompañando a los dimonis va el Grif, que es una mezcla entre un águila y un león, y que va tirando fuego y petardos durante el correfoc que realiza la Colla de Dimonis durante las fiestas.



En la fiesta de Sant Antoni, a parte de los dimonis, hay unos personajes muy queridos por todos que son los caparrots. Hay dos tipos de caparrots: unos más pequeños, que los llevan niños de entre 8 y 10 años; y otros más grandes que los llevan adultos. Siempre ha sido mi parte favorita de la fiesta y la canción es tan pegadiza que se te queda en la cabeza. Aunque nunca he sabido la letra... Margarita fue tan amable que nos cantó una parte de esta canción (de la que existen varias versiones) y dice así:

"Jo i un pastor, que vivien d'amoretes;
jo i un pastor, que vivien de l'amor.
Ara ve Sant Ferriol, ballarem si Déu ho vol;
el qui toca el tamborino ha perdut el flabiol."

Estos personajes realizan el baile de esta canción en la plaza del ajuntament y después empieza el espectáculo piro musical que es ¡increíble! Esto sí hay que verlo aunque sea una vez en tu vida. Recuerdo mi primera vez como si fuera ayer y como me sorprendió.

Después del espectáculo en el centro de la plaza se van cantando glosses de Sant Antoni. Unos pequeños versos en los que la primera frase siempre rima con la última. La mayoría suelen ser picantonas y ese día se puede uno meter con quién quiera, siempre que lo haga con un poco de gracia. Todo acompañado por el sonido de un par de ximbombas.



El hijo pequeño de la prima de Xisco siempre canta ese día un par de glosses en la plaza. Y ahí estamos nosotros siempre viéndolo. Y después toca la mejor parte de la fiesta..... A SOPAR!!!

Espinagadas
En este día la comida típica son las espinagadas. Es una especie de empanada con verduras y anguilas. La familia de Xisco se encarga cada año de hacerlas todas y siempre se acuerdan de hacerme una especial para mí (como se nota que me quieren mucho). Con un poco de suerte el año que viene les ayudaré a hacer las espinagadas y os contaré la receta. También suelen hacer unas cocas de pimientos que son buenísimas y una coca de verdura con musola (un tipo de pescado).


Esa noche hay unas 130 hogueras en el pueblo para celebrar la fiesta y hacer foguerons para torrar carne, sobrasadas, butifarrones o simplemente para acompañar el ambiente. Simplemente hay que pedir permiso al Ayuntamiento y ellos se encargan de preparar el suelo para que tu pongas la leña.

Al visitar el museo pude recordar cada una de las veces que he ido a Sa Pobla por Sant Antoni y que nunca me canso de repetir. Además ahora al escribir esta entrada hemos vivido ya la de 2014 y cada año me sorprende más.

Quiero agradecer a Margarita por toda la información que nos ofreció en el museo y al grupo de Winter Activities que siempre organiza estas visitas tan especiales. Os animo a todos a conocer tanto la fiesta como este museo.


Y con mis personajes favoritos de esta fiesta nos despedimos de vosotros desde Sa Pobla.

¡Hasta la próxima!


miércoles, 4 de diciembre de 2013

Can Prunera Museu Modernista

El día que fuimos a ver el Ferrocarril de Sóller, también fuimos a este precioso museo. Y hoy os voy a contar cómo fue nuestra visita.


Can Prunera Museu Modernista

El Museu de Can Prunera se encuentra situado en una casa muy especial en el carrer Sa Lluna de Sóller. Esta casa pertenecía a la familia de Can Prunera y su historia es muy interesante.

Ya sabemos que una de las cosas que más destacan en Sóller son las naranjas y los limones. Pues esta familia se dedicaba a la venta de estas frutas (de ahí su nombre tan característico). Debido a una fuerte plaga que destruyó toda la cosecha se vieron obligados a emigrar a otros países para buscarse la vida como tantas otras familias. Vivieron muchos años en Francia y cuando ya tenían una fortuna hecha volvieron a Sóller y construyeron esta casa. Se puede ver el estilo francés en muchas partes de esta casa.

Tiene un patio trasero muy original en el que en verano ponen tablas sobre estas pequeñas columnas de hormigón y donde realizan conciertos de música clásica. Si no lo recuerdo mal, el patio no era así en la antigüedad sino que está reestructurado. Aquí podemos ver algunas esculturas.



La fachada de la casa es completamente diferente a las casas que podemos ver en el pueblo. Según he leído en su página web, existen otros tres edificios que comparten estas características y que se encuentran en Palma.

Las ventanas de la fachada exterior tienen una forma tan espectacular que las persianas se tuvieron que hacer a mano completamente. Las puertas que dan al patio interior tienen unas vidrieras con unos detalles que ¡son impresionantes!



Dentro de la casa todavía se conservan los suelos, muebles, camas y enseres de la familia que podemos observar fácilmente y que ayudan a hacerse una idea de como debían vivir antiguamente. Está todo lleno de detalles desde el techo hasta el suelo.




Dentro del museo hay varias salas de exposiciones permanentes y otras que son temporales. También hay una pequeña sala en la que se puede ver una extensa colección de muñecas antiguas.

No soy muy entendida en cuadros, no os voy a engañar. Me gustan los cuadros que me sorprenden o me dicen algo.

Esta casa se divide en cuatro plantas y tiene una preciosa escalera de caracol que sube desde el sótano hasta el ático. ¡Una maravilla! La barandilla de metal y madera es preciosa. Justo encima de la escalera hay una claraboya por la que entra muchísima luz y hace que esta estructura destaque todavía más.



Si os apetece visitar este museo, este fin de semana, los días 6 y 7 de diciembre, la entrada tiene un precio especial a 3€ debido a un evento que realizan en Sóller. Puede ser una excusa perfecta para visitar este museo y os invito a que los conozcáis.

Aunque a esta visita fui sin mi marido Xisco, espero que podamos ir alguna vez juntos y enseñarle esta maravilla de museo.

¡Hasta la próxima!

martes, 25 de junio de 2013

Museu de sa jugueta

La semana pasada fuimos a cenar, casi por casualidad, a uno de los sitios que tenía pendiente visitar. Resulta que en el Museu de sa jugueta hay un bar que se llama Toys & tapas en el que hacen unas hamburguesas gigantes de 1 kilo. Nuestro amigo Pedro conoce a uno de los socios y ya le había comentado un par de veces a ver si se atrevía con la hamburguesa Hulk (como se llama a esta hamburguesa de 1 kilo). Si eres capaz de comerte la hamburguesa tú solo, te regalan una camiseta honorífica que demuestra que eres el campeón. Si no recuerdo mal, creo que hasta la fecha solo lo han conseguido dos personas.

Nuestra amiga María posando con Hulk
He de decir que nosotros nos la comimos entre cuatro... ¡no somos tan valientes! La hamburguesa estaba muy buena y era muy completa, acompañada de deliciosas patatas fritas. Me gustó mucho la mezcla de la carne y estaba muy sabrosa. Aunque era un poco difícil para comer. No sabías por donde tenías que hincarle el diente.


Después de la cena probamos un par de chupitos muy originales que os servirán estos encantadores camareros de Toys & tapas. ¡Vaya sorpresa para algunos!

El bar está decorado con juguetes antiguos. Aviones que cuelgan del techo, cabezudos encima de la barra, fotos antiguas y lo más original, la barra está forrada con páginas de cómics antiguos. También hay una pequeña exposición temporal de unos juguetes muy especiales. No puedo explicároslo, tendréis que ir a verlo. Aunque el museo ya estaba cerrado a esas horas tuvieron el detalle de abrirlo para nosotros solos. ¡Esto de tener enchufe es un auténtico lujo!

No se si voy a poder encontrar las palabras justas para definir lo que vimos allí. ¡Cuántos juguetes! ¡Madre mía! Había de todo tipo de juguetes antiguos. Coches, bicicletas, muñecas, juegos de mesa, casitas... y todo lo que te puedas imaginar. El museo tiene tres plantas y está ordenado por temas. Lo que más nos llamó la atención, sin ninguna duda, fueron los triciclos antiguos. Los mecanismos para mover el triciclo eran de lo más extraño.


Otra de las cosas que también nos gustó mucho es que al lado de muchos juguetes podías ver fotos antiguas con los niños de aquella época jugando con dichos juguetes. Esto es más que un museo del juguete, ¡es un museo de historia viva popular!


Los payasos de la tele
He de decir que aunque muchos de los juguetes me sonaban, son mucho más antiguos que yo y no son de mi época. Pero vi algo que me encantó. Aquellas muñecas de papel recortables. Yo jugaba con ellas de pequeña... Y si tuviera que quedarme con algo especial de este museo, elegiría los muñecos de los payasos de la tele. ¿Cómo están ustedes?


Recomendado 100 por 100 la visita, tanto al museo, como al bar. Y desde este lugar tan especial, que nos ha encantado, nos despedimos ¡hasta la próxima!



lunes, 5 de marzo de 2012

Castell de Sant Carles

Este fin de semana pasado estuvimos celebrando el Dia de les Illes Balears. Y nosotros elegimos el Castell de Sant Carles como visita para el día 1 de Marzo, que es cuando celebramos nuestra diada.

Castell de Sant Carles

Este castillo se encuentra en el Dique del Oeste de Palma. Allí dónde atracan las cruceros. La entrada se encuentra un poquito antes de llegar a los muelles y está perfectamente señalizada. Este castillo se utilizó durante muchos años como punto estratégico militar para defender el puerto de Porto Pi. Cosa que no me extraña, porque desde aquí se puede ver toda la bahía de Palma.

La entrada al Castell de Sant Carles es libre, una de las pocas que quedan, porque por lo que he podido leer esta semana, ahora tendremos que pagar todos los días para entrar al Castell de Bellver (incluso los residentes). El Castell de Sant Carles se construyó en el siglo XVIII y desde 1981 es un museo histórico militar.

Dentro del castillo encontraremos diferentes salas numeradas en las que podremos observar distintos objetos de las batallas y guerras en las que Illes Balears o España han participado.

La primera impresión al entrar es que no vamos a ver mucha cosa más que la fortificación, que se encuentra en muy buen estado. Pero las apariencias engañan... Desde la entrada principal accedemos al patio de armas en el que podemos observar varias puertas o salas numeradas. ¡Y esa fue nuestra sorpresa! Al entrar en cada una de las salas, que parecían mucho más pequeñas desde fuera, accedías a un universo de objetos históricos que van desde la Edad Media hasta mediados del siglo XX. Visitamos las salas de derecha a izquierda y así es como os las voy a describir.

SALA I
En la primera sala podemos ver una gran colección de todo tipo de espadas de muchas partes del mundo. Hay floretes, navajas, dagas, lanzas, y todo lo que se te ocurra para pelear en una batalla. También hay una larga lista de escopetas, rifles, pistolas... datadas del siglo XVIII y XIX.





Los que más me llamaron la atención eran los mosquetes con los que se podía realizar un solo disparo y tenían que limpiar el cañón, cargarlo de pólvora y después de unos segundos volver a disparar, eso si tenían la suerte de no haber muerto antes. En esta colección también se pueden ver las polvoreras y los palos con los que limpiaban el cañón de los fusiles. Hay varios maletines con pistolas de duelo, hachas y machetes muy raros e incluso un libro en el que escondían un revólver. Una colección curiosa.

En la segunda sala hay una miniatura hecha de madera del edificio de la Lonja en la que durante un tiempo fue utilizada para fabricar cañones. Primera noticia que tengo. Y yo que creía que se había utilizado solo para vender pescado...

En esta pequeña sala también podemos encontrar una maqueta inmensa en la que se representa una batalla con un montón de soldaditos de esos minúsculos pintados a mano. ¡Un trabajazo! Merece la pena que nos detengamos un momento para observarla. Como están colocadas estratégicamente las diferentes compañías. Como han cuidado cada uno de los detalles de cada soldado. ¡Muy bonita!

La tercera sala está divida en tres secciones. En la primera puerta a la izquierda podemos ver objetos personales del general Valeriano Weyler y Nicolau. No soy yo la más indicada para hablar de historia, porque más bien conozco poca. Pero por lo que pude leer tuvo muchos cargos militares importantes y estuvo un muchos momentos importantes de nuestra historia. Creo que si tuviera que hacer un resumen de lo que hizo este hombre, tendría que crear un blog solo para él. Lo siento, la historia no es nuestro fuerte.

Si entramos por la puerta que queda en frente, cuando entramos en esta sala, podemos ver un pequeño espacio dedicado a todas las torres de vigilancia que hay en Mallorca. Algunas mejor conservadas que otras.

Medallas y cruces militares
Y la última sección de esta sala es la que está en el primer piso, subiendo las escaleras que nos quedan a la derecha, nada más entrar en esta sala. De nuevo nos encontramos con un gran espacio dedicado al vestuario militar, medallas y cruces de condecoraciones militares. Muchos de estos objetos han sido cedidos por sus familias, por eso queremos dar las gracias por compartir su historia, nuestra historia, con todos.

También hay una gran colección de banderas militares de Baleares y de España de muchas épocas diferentes. Y un pequeño rincón dedicado a la memoria del Crucero Baleares.

En la cuarta sala encontramos de nuevo una colección de armas, pero más actuales. También varios sistemas de comunicaciones y el sistema de lotería en el que se sorteaban los destinos del servicio militar. Lo que me pareció, más que curioso, fue la similitud de las bolas que utilizaban para realizar el sorteo militar con las que se utilizan hoy en día para el sorteo de la Lotería Nacional. No se si tienen algo en común. Lo desconozco. Si alguien lo sabe, que nos saque de dudas. ¿Será por eso que han inaugurado una exposición sobre los 200 años de la Lotería Nacional en este castillo?

En la última sala que podemos visitar, antes de subir al primer piso de la fortaleza, encontraremos un rincón dedicado als Foners de Mallorca. Lo que actualmente se conoce como un deporte (Tir de Fona), en la antigüedad la fona se utilizaba como un arma. Consiste en un trozo de cuerda con el que se pueden lanzar pequeños trozos de piedra o plomo a largas distancias. En esta sala también podemos ver una serie de cuadros dedicados al Tir de Fona.


Una vez visitada la parte inferior del castillo podemos acceder a la primera planta subiendo las escaleras que se encuentran justo al lado de los servicios. Aquí aún se mantienen los mecanismos que utilizaban para transportar los misiles hasta la azotea, dónde podemos ver algunos cañones que se conservan. Desde arriba podemos ver perfectamente toda la bahía de Palma.


Antes de abandonar el castillo se puede ver una última sala dedicada a los cañones. Cómo se fabricaban los cañones, los misiles... También se puede ver dónde se encuentran los cañones Vickers de las islas. Nosotros visitamos el famoso Vickers de calibre 381 cuando estuvimos en La Mola de Maó en Menorca. ¡Era inmenso!

Y eso es casi todo lo que puedo contar del Castell de Sant Carles. Seguro que se me ha olvidado describir alguno de sus detalles, pero es que nos hemos sorprendido mucho de lo que nos hemos encontrado. ¡Y entrada libre! Creo que hemos pagado entrada en muchos sitios que no ofrecen ni una tercera parte de lo que se ofrece aquí. Así que si algún día no sabéis que ir a ver, os recomendamos esta visita.

 Y con la bahía de Palma a nuestras espaldas nos despedimos hasta la próxima.